La Senadora Constanza Moreira reconoció la firmeza en la intervención del canciller uruguayo, Nin Novoa, a la vez que manifestó que llama la atención cómo el tema de Venezuela viene acaparando la agenda mundial como no lo hicieron otros temas.
Comparó la reacción de la oposición y del mundo frente a la situación de Venezuela con la inacción ante la destitución de Dilma en Brasil y la “extrañísima elección en Honduras”, “No ví que armaran un escándalo por lo ocurrido porque a quién le importa Honduras», se preguntó. “Es la lucha por el poder geopolítico en América Latina”, concluyó.
“Se quejan de los presos políticos en Venezuela pero no los oí decir nada sobre Brasil, donde se celebraron elecciones con el preso político más importante de la historia de la América Latina, Lula, con un juicio que fue un fraude y con un juez que lo juzgó y que hoy es miembro del gabinete de Bolsonaro, ¡y eso es un escándalo!”. “Ni se preocupan de los 300 asesinatos en Colombia, pero son de campesinos, dueños de empresas de transporte” “¿entonces no importan?, se cuestionó.
“La política exterior del Uruguay merece un reconocimiento en el sentido de su profesionalismo” “Un país pequeño, como nosotros, que protagonizó un encuentro con más de 50 países, que logra hacer desensillar a la Unión Europea de su pretensión de celebrar elecciones en 90 días, mientras nombran un presidente encargado”, “más neocolonialista que ese lenguaje, imposible” sentenció.
El Uruguay “logra desnudar la mascarada del reconocimiento a Guaidó por parte de Trump y la Unión Europea”. Recordó que “Guaidó tuvo 96.000 votos mientras que Maduro tuvo 6 millones” con un 40 % de participación electoral.
“¿Por qué el Uruguay va a la asunción de Maduro? ese es el motivo de la convocatoria”. “¿Cuál es la pregunta? No son elecciones fraudulentas las de Venezuela”, argumentó. “La legitimidad de Maduro está dada por un proceso electoral, con el 46 % de los votos. De la misma manera que la legitimidad de la Asamblea Nacional”.
Recordó que el presidente Sanguinetti fue un presidente legítimo a pesar de que estaban proscriptos Seregni y Wilson.
“La maniobra de declarar a Guaidó presidente es una maniobra injerencista, colonialista y es violentatoria del derecho internacional” declaró.
“¿Ayuda humanitaria? Es la hipocresía mundial” y preguntó si “¿Ustedes saben los problemas que tiene Venezuela para importar medicamentos porque tiene las cuentas congeladas, no tiene crédito y se le quedan con las reservas?”
“El pueblo de Venezuela puede estar sufriendo por la mala gestión de Maduro y Chávez, pero está sufriendo por el bloqueo económico impuesto por Estados Unidos y secundado por los otros”
Y culminó su intervención diciendo que “sobre democracia que nadie le venga a enseñar a Uruguay ni a América Latina cómo practicar las democracias y menos aún Estados Unidos”.