Llamamiento por amor a la vida
El pasado miércoles, el Presidente de la República recibió a la Comisión del Senado de seguimiento de la pandemia en el país. Un gesto que nos hizo pensar en la posibilidad de un diálogo real con el Gobierno, que no habíamos logrado desde marzo del año pasado. Sin embargo, la decepción fue grande.
El Presidente dejó clara su posición: ni medidas de reducción de la movilidad social, tal como reclamaba el GACH, ni compensaciones económicas a las familias y a las pequeñas empresas y con mayores dificultades. No confía en que los uruguayos y uruguayas vayan mayoritariamente a acatar estas medidas.
Esta negativa se da en un contexto de casi 4.000 contagios y más de 50 fallecidos por día. No son números; son personas y familias que sufren. No es aceptable naturalizar la enfermedad y la muerte. Expresamos nuestra solidaridad con quienes sufren esta dramática situación.
La estrategia de la denominada “libertad responsable” ha fracasado y nos ha llevado a estos resultados. Es imperioso intentar una estrategia diferente.
El GACH ha sido nítido en que la vacunación va a ser efectiva sólo si se bajan sustancialmente los contagios y, para que esto suceda, se debe disminuir la movilidad social por un tiempo. El Gobierno ignora las recomendaciones del mundo científico y del mundo médico, a pesar de que el costo de esta medida es absolutamente manejable por parte del Estado uruguayo. El mismo ascendería a 0,3% del PIB, la décima parte de los títulos que el país colocó recientemente en los mercados internacionales. ¿Hay mejor uso de este dinero que intentar bajar contagios y salvar vidas? El Gobierno sigue festejando ahorros, cuando la sociedad uruguaya más necesita recursos. El Gobierno lleva adelante una política que favorece a los sectores económicos que concentran mayor riqueza y la aumentan durante la pandemia.
No es cierto que el Gobierno haya implementado la mayoría de lo planteado por el GACH. Si así fuera, no se explicaría que sea justamente desde el GACH que se reclamen medidas más drásticas. Tampoco es cierto que vaya a tomar la mayoría de las propuestas del Frente Amplio. No acompaña las medidas sustanciales de disminuir las interacciones humanas con compensaciones económicas a la población más necesitada, ni incrementa la inversión pública para reactivar la economía. Sin mensajes claros y apoyo económico, difícilmente baje la movilidad y seguirán ocurriendo muertes evitables.
El rechazo soberbio a nuestros aportes, impide acuerdos imprescindibles para superar esta dura situación que viven tantas familias. La Comisión parlamentaria, que el oficialismo abordó a regañadientes, no parece haber contribuido sustancialmente en este contexto.
A la vista de los trágicos resultados que estamos sufriendo y la insuficiencia de las medidas adoptadas, el Frente Amplio impulsará, en los próximos días, acciones políticas y parlamentarias para exigir las responsabilidades correspondientes.
Debemos seguir focalizados en combatir el desastre sanitario y la profunda crisis económica y social. Nuestra prioridad es la vida.
El Frente Amplio estará al frente de la lucha para la defensa de los derechos y necesidades de la población, en la lucha por la vida.
MESA POLITICA DEL FRENTE AMPLIO
Montevideo, 04 de junio de 2021